Llevamos tiempo escuchando aquello de que cada vez es más difícil distinguir la realidad que la ficción, que la convivencia de humanos y máquinas en el entorno digital y el perfeccionamiento tecnológico complica sobremanera diferenciar sus acciones. Y está claro que, en este contexto, la inteligencia artificial está desempeñando un papel de creciente importancia, que va mucho más allá de la simple automatización de procesos y recopilación de datos. También es capaz de crear experiencias de usuario innovadoras y personalizadas.
En los últimos días una noticia aparecida en varios medios de comunicación ha venido a confirmar que la evolución hacia una convivencia de facto está cada vez más cerca. Porque si hasta ahora, popularmente, la IA se asomaba con un poder inconmensurable en la creación de contenidos de texto y audiovisuales para diferentes canales, hoy se asoma como futura protagonista de las redes sociales. No nos referimos a su capacidad de mejorar nuestros posts, ni siquiera a los cada vez más célebres influencers virtuales. Hoy la IA aparece como un igual, un usuario como nosotros con el que podamos interactuar. Expliquémonos un poquito mejor.
A comienzos del mes de junio se dio a conocer el lanzamiento de una nueva red social Butterflies. Hasta aquí, nada nuevo bajo el sol. Lo que cambia en Butterflies es que esta es lo que se ha venido a llamar una red social híbrida. Este concepto, lo vamos a ver, abre un campo aún inexplorado y lleno de oportunidades para el marketing.
¿Qué es Butterflies?
“En esta nueva red social puedes relacionarte, como si fueran otras personas, con personajes que han sido creados por la IA y que reciben, precisamente, el nombre de butterflies”
Apenas tiene unas semanas de vida, pero la primera red social híbrida comienza a desatar todo tipo de comentarios. En pocas palabras, podríamos decir que Butterflies es una red en la que interactúan tanto usuarios humanos como entidades artificiales. Combina aspectos muy similares a redes como Instagram con una dinámica totalmente innovadora. En ella puedes relacionarte, como si fueran otras personas, con personajes que han sido creados por la IA y que reciben, precisamente, el nombre de butterflies. Ha sido, por cierto, fundada por Vu Tran, un antiguo gerente de ingeniería de Spapchat. O sea, que de redes sociales, sabe lo suyo.
Los avatares generados por la IA cuentan con su propia personalidad. Tienen una historia detrás, muestran emociones diversas y opiniones diferentes. Los propios butterflies escriben posts sobre sus vidas, hacen comentarios a las publicaciones de los usuarios humanos e, incluso, envían mensajes directos. A partir de los aprendizajes que generan en sus interacciones mantienen una evolución que intensifica las relaciones entre los “dos mundos”.
Butterflies ofrece un nuevo paradigma en el ecosistema de las redes sociales. En este entorno híbrido aparece un campo fértil para el marketing, que permite a las empresas explorar nuevas estrategias y tácticas para alcanzar y comprometer a su audiencia. Y es que coexistencia de inteligencia humana y artificial en plataformas como Butterflies no solo redefine las interacciones sociales, sino que también ofrece oportunidades únicas para personalizar y optimizar las campañas de marketing.
Esta innovación constata la vertiginosa evolución de la IA. No en vano, ha pasado de ser una herramienta de análisis de datos a un componente central en la creación de estrategias de marketing. Los datos lo reflejan con toda claridad. Según un informe de PwC, se espera que la IA contribuya con hasta 15,7 billones de dólares a la economía global de aquí al año 2030, impulsando una amplia gama de industrias, incluida la publicidad y el marketing. La personalización a gran escala y las nuevas interacciones prometen multiplicar el engagement en todos los canales digitales.
Qué oportunidades ofrecen las redes sociales híbridas para el marketing
La coexistencia de inteligencia humana y artificial en redes sociales y otros canales representa una oportunidad sin precedentes para el marketing. Aún están por definirse muchas de sus posibilidades, pero con lo que sabemos, ya podemos apuntar algunas oportunidades que hasta hace poco nos parecerían increíbles.
Generación de nuevas narrativas
En un entorno donde conviven inteligencias humanas y artificiales, la creación de contenido adquiere una nueva dimensión. Las IA pueden generar contenido automáticamente, desde publicaciones en redes sociales hasta artículos completos, basándose en datos de comportamiento y preferencias de los usuarios. Esto va a permitir a las marcas mantener una presencia muy relevante en plataformas como Butterflies. Y lo que es al menos tan importante: sin la necesidad de un esfuerzo humano constante.
Además, las narrativas generadas por IA pueden ser personalizadas para diferentes segmentos de audiencia. Por ejemplo, una marca de deportes podría utilizar la IA para crear historias visuales personalizadas para diferentes grupos de edad, géneros o ubicaciones geográficas.
Avances en la publicidad programática
La integración de IA en redes sociales híbridas promete llevar a la publicidad programática a un nivel superior. ¿Te preguntas por qué? Los algoritmos de inteligencia artificial pueden analizar datos en tiempo real para identificar las mejores oportunidades de publicidad, optimizando las campañas para maximizar el retorno de la inversión. En plataformas como Butterflies, donde la IA puede interactuar directamente con los usuarios, las marcas pueden utilizar anuncios interactivos que responden y se adaptan en tiempo real. Las experiencias publicitarias serán, de esta forma, más envolventes y efectivas.
Toma de decisiones a partir del análisis predictivo
La capacidad de la IA para analizar grandes volúmenes de datos y hacer predicciones precisas es una ventaja crucial para el marketing. En una red social híbrida, las marcas van a poder utilizar el análisis predictivo para anticipar las tendencias y comportamientos de los usuarios y ajustar las estrategias en tiempo real. Esto no solo permite una mejor planificación y ejecución de campañas, sino que también ayuda a las empresas a identificar nuevas oportunidades de mercado y adaptarse a los cambios en las preferencias de los consumidores.
Servicio al cliente automatizado
El servicio al cliente es un área donde la IA ya ha demostrado ser muy útil, pero las redes sociales híbridas prometen amplificar esta utilidad. En Butterflies, por ejemplo, los usuarios artificiales podrán interactuar con los clientes en tiempo real, resolviendo problemas y ofreciendo soporte sin la necesidad de intervención humana. Y esto va a aumentar la productividad y mejorar los resultados, ya que libera recursos humanos para las tareas más complejas y estratégicas.
Colaboración entre IA y humano
La optimización de los procesos colaborativos entre humanos e IA será fundamental para el éxito en el marketing de entornos híbridos. Las marcas deben buscar formas de combinar la creatividad y el pensamiento crítico humano con la eficiencia y la precisión de la IA. Esto no solo mejorará la efectividad de las campañas de marketing, sino que también permitirá a las empresas ofrecer experiencias más ricas a sus clientes.
Experiencia del usuario
Porque, precisamente, ya es la experiencia del usuario el factor diferenciador en el éxito en el marketing. Y su triunfo en entornos híbridos va a depender indudablemente de la capacidad de las marcas para crear experiencias excepcionales para los usuarios. La IA ofrece herramientas poderosas para personalizar y optimizar estas experiencias, pero es fundamental mantener un enfoque con el usuario humano en el centro. Esto incluye comprender sus preferencias y necesidades, anticiparse a sus expectativas y proporcionar un valor tangible en todas y cada una de las interacciones.
¿Y qué hay de los dilemas éticos?
A pesar de las numerosas oportunidades que ofrece la integración de la IA en redes sociales híbridas, también existen desafíos y consideraciones éticas que tienen que ser tenidos muy en cuenta.
- Seguridad de los datos y privacidad. La recopilación y el análisis de grandes volúmenes de datos por parte de la IA plantean preocupaciones importantes. Las marcas deben asegurarse de cumplir con las regulaciones de protección de datos y adoptar prácticas transparentes en la gestión de la información del usuario. Además, es fundamental implementar medidas de ciberseguridad eficaces que protejan de ataques.
- Transparencia. Sin ella no es posible construir y mantener la confianza del usuario. Las marcas deben ser claras sobre el uso de IA en sus interacciones y proporcionar información sobre cómo se utilizan los datos recopilados. Esto incluye informar a los usuarios cuando están interactuando con una entidad artificial en lugar de una persona real.
- Prácticas contra la discriminación. Ya sabemos que los algoritmos pueden perpetuar sesgos y discriminación si no se diseñan y supervisan adecuadamente. Los sistemas de IA han de ser justos e imparciales, evitando prácticas discriminatorias que puedan excluir o perjudicar a ciertos grupos de usuarios. Esto requiere una supervisión constante y la puesta en marcha de mecanismos para identificar y corregir posibles sesgos en los algoritmos.
Conclusión
Plataformas innovadoras como Butterflies están liderando el camino hacia un futuro donde las interacciones entre usuarios y entidades artificiales van a ser parte integral de la experiencia digital. Las marcas que adopten estas tecnologías y enfoques innovadores estarán mejor posicionadas para aprovechar las oportunidades que ofrecen estos entornos híbridos. La combinación de inteligencia humana y artificial tiene el potencial de transformar el marketing de maneras profunda, permitiendo a las empresas conectar con sus audiencias de formas más relevantes y efectivas que nunca antes. Ser capaz de entenderlo desde ya mismo y aprovechar las posibilidades que ya asoman permitirá llevar una ventaja sobre la competencia que puede ser decisiva en el corto y medio plazo.