El Tribunal General de la UE ha dado la razón en parte a la empresa española de ropa y calzado Pablosky al considerar que hay riesgo de confusión con la marca de una empresa alemana en lo relativo a prendas de vestir y sombrerería, si bien ha desestimado los recursos relativos a calzado.
El caso se remonta a 2017 cuando la empresa español recurrió ante la Oficina de Propiedad Intelectual (EUIPO) el registro de la marca alemana en cuestión, ‘mediFLEX easystep, alegando riesgo de confusión con su marca ‘Stepeasy’ registrada para ropa, calzado y artículos de sombrerería. Entonces la EUIPO estableció ese riesgo y se opuso al registro, algo que recurrió la compañía germana.
Ahora en su sentencia, el Tribunal General anula las resoluciones de la EUIPO en la medida en que se refieren a las prendas de vestir y a los artículos de sombrerería, y desestima los recursos de Pablosky en todo lo demás, es decir en el calzado.
En lo relativo a calzado anatómico y ortopédico, el tribunal establece que la similitud global entre las marcas «no es suficiente» para considerar que los potenciales clientes puedan creer que esos productos proceden de la misma empresa o de compañías vinculadas económicamente, a pesar de que los productos de que se trata sean idénticos.
Alega que los productos de la marca alemana, pese a las similitud con Pablosky, van dirigidos a profesionales sanitarios especializados en ortopedia y a los consumidores del público en general con problemas ortopédicos que implican la utilización de calzado adaptado, por lo que tienen un nivel de atención medio y elevado.
En cambio, sobre las prendas de vestir y la sombrerería el fallo da la razón a Pablosky al entender que la similitud entre las marcas es suficiente para considerar que el púbico puede pensar que los productos proceden de la misma empresa.